Hoy ha sido un mal día para toda Europa, la ciudadanía europea se encuentra un poco menos segura y la Unión Europea ha dado una muestra más de desprecio hacia sus ciudadanos y ciudadanas. Podemos decir, sin temor a equivocarnos que tampoco es un buen día para el ecologismo, ni para los derechos sociales, laborales o la salud de los consumidores, ya que desde hoy todas y todos estaremos más desprotegidos. Eso sí, ha sido un gran día para las multinacionales que no paran de frotarse las manos.
Hace unas horas las y los europarlamentarios que no velan en absoluto por nuestros derechos, y sí por los de la banca y las mutinacionales (concretamente en nuestro país PP, PSOE y C´s) han votado SÍ al acuerdo comercial y de inversión entre la UE y Canadá, más conocido como CETA, del cual ya os hemos informado en múltiples ocasiones y del que os señalamos los males que nos acechaban si se firmaba este acuerdo.
El CETA ha ganado esta batalla, pero debemos reconocer que también es más fuerte el movimiento que ha hecho posible estos años de lucha contra la nueva generación de acuerdos comerciales, TTIP, CETA, TISA..., cada día somos más.
Tras su aprobación en el Parlamento Europeo, este acuerdo va a aplicarse provisionalmente a partir de abril. Todas y todos sabemos quiénes son los grandes beneficiados, las grandes corporaciones tanto de Canadá como de EE.UU. Algunos estudios hablan incluso de la pérdida de 200.000 puestos de trabajo en toda la UE a causa de este tratado.
No debemos olvidar que la lucha continúa, el CETA deberá ser ratificado en los parlamentos nacionales y regionales de los 27 países de la Unión Europea, por lo que es necesario e imprescindible seguir luchando contra esta forma de entender el orden mundial y sus consecuencias.
No podemos permitir que se antepongan los beneficios de las grandes multinacionales frente al medio ambiente, a nuestra salud, a nuestros derechos laborales y sociales.
No podemos permitir que se antepongan los beneficios de las grandes multinacionales frente al medio ambiente, a nuestra salud, a nuestros derechos laborales y sociales.
